Sponsor:
Este trabajo es fruto del proyecto de investigación coordinado “Vías de acceso a la divinidad”, financiado
por el Plan Nacional de Investigación del MINECO . Los tres autores son miembros del subproyecto
EPIDI (HAR2017-84789-C2-2-P) que se desarrolla en el seno del grupo de investigación, reconocido
por la Comunidad de Madrid, “Historiografía e Historia de las Religiones”, del Instituto de Historiografía
Julio Caro Baroja de la UC3M.
Rights:
Atribución-NoComercial-SinDerivadas 3.0 España
Abstract:
La iconografía de la vestimenta de Atis es muy variada. Uno de los tipos más característicos es la imagen del dios con el vestido abierto mostrando, con frecuencia, el sexo. La forma en la que se abre la túnica no deja lugar a dudas: representa una vulva. Es sLa iconografía de la vestimenta de Atis es muy variada. Uno de los tipos más característicos es la imagen del dios con el vestido abierto mostrando, con frecuencia, el sexo. La forma en la que se abre la túnica no deja lugar a dudas: representa una vulva. Es sugerente imaginar que esa forma alude al momento del mito en el que se produce la eviración. El Carmen 63 de Catulo es un buen material propedéutico para el problema. Más allá de la constatación de la ambigüedad sexual del dios cercenado, lo interesante en este caso es que la ambigüedad se resuelve mediante un mecanismo ideológico de oposición de contrarios: lo que no es claramente viril, aparenta femenino. En consecuencia, la representación de la vestimenta es aprovechada para resolver un conflicto de los observadores que soportan mal la indefinición genérica: la pérdida del sexo masculino se reviste con la marca genital femenina.[+][-]
The iconography of Attis’ clothing is
varied. One of the most characteristic types
is the image of the god with the open dress
showing often his sex. The way the tunic
is opened leaves no doubt: it represents a
vulva. It is suggesting imagining that this
The iconography of Attis’ clothing is
varied. One of the most characteristic types
is the image of the god with the open dress
showing often his sex. The way the tunic
is opened leaves no doubt: it represents a
vulva. It is suggesting imagining that this
form alludes to the moment of the myth
whereby the castration takes place. Catullus’s
Carmen 63 is a good propaedeutic
material for the problem. Beyond the
verification of the sexual ambiguity of the
emasculated god, the interesting point in
this case is that the ambiguity is resolved
by means of an ideological mechanism of
opposition of opposites: what is not clearly
virile, seems feminine. Consequently, the
representation of the clothing is used to resolve
a conflict generated in the observers
who badly endure generic lack of definition:
the loss of the male sex is clothed with the
female genital mark.[+][-]