Editor:
Mejón, Ana Conte Imbert, David Zahedi, Farshad
Editorial:
Universidad Carlos III de Madrid
Fecha de edición:
2019
Cita:
Congreso Internacional Interdisciplinar: La ciudad: imágenes e imaginarios. (2018, Getafe). Ana Mejón, Farshad Zahedi, David Conte Imbert (eds.). Getafe: Universidad Carlos III de Madrid, 2019, pp. 178-182
Derechos:
Atribución-NoComercial-SinDerivadas 3.0 España
Resumen:
En la década de los 50/60, se realizaron unas cuantas películas, largometrajes de
entretenimiento para el gran público, muy taquilleras, enfocadas en Madrid, pero muy
poco estudiadas por la Universidad, quizá por no presentar un interés visual o narrativo
dEn la década de los 50/60, se realizaron unas cuantas películas, largometrajes de
entretenimiento para el gran público, muy taquilleras, enfocadas en Madrid, pero muy
poco estudiadas por la Universidad, quizá por no presentar un interés visual o narrativo
destacable. Con todo, en estos filmes, Madrid no solo es el decorado de unas comedias
de enredo sino un verdadero personaje cinematográfico que plasma la modernidad
occidental del nuevo aliado, Estados Unidos. En 1958, “Las chicas de la cruz roja”
dirigido por Rafael J. Salvia, filme más relevante de este corpus, remodela la modernidad
cinematográfica de Madrid. Surge una Ciudad capitalina resplandeciente que se ha
convertido en cuidad americana. Mas al tiempo, al rematar en ella los recorridos que los
nacionales dibujaron en 1939 para “el Desfile de la Victoria”, Rafael Gil viene a
sustanciar el imaginario propagandístico franquista, y la película de ocio gran público
pasa a ser—como si nada—una película de propaganda. Avatar de ficciones
hollywoodienses, con los recorridos ideados el filme también reactiva aquel imaginario
del Madrid del “Desfile de la Victoria” de 1939. Madrid viene a ser el teatro urbano en el
que la modernidad de hoy y mañana empalma y realza la de ayer, siempre viva. De manera
solapada, el filme de Rafael J. Salvia le brinda un apoyado tributo al régimen, tanto más
cuanto que los dos recorridos sur/norte y este/oeste empalman en la película en el cruce
de la Plaza de Cibeles, aquella misma plaza que ya en 1939 se ostentó como epicentro del
nuevo Madrid. Descentrada pues se queda la capital franquista en “Las chicas de la Cruz
roja” que sigue desdibujando, veinte años después, el punto cero y corazón del Madrid
republicano que fue la Puerta del Sol.[+][-]
Nota:
Comunicación presentada en el Congreso Internacional Interdisciplinar "La ciudad: imágenes e imaginarios" celebrado en la Facultad de Humanidades, Comunicación y Documentación, Universidad Carlos III de Madrid del 12 al 15 marzo de 2018.